Depende mucho del estadio de la canción, del briefing que hayamos tenido previo a la producción y de la velocidad de respuesta el artista pero por lo general me tomo de dos a tres días para producir -para poder dejar descansar las ideas y agarrarlas frescas después, y dos días para mezclar y masterizar. En el caso de que sea un disco. El mastering lo hago en 2 días una vez terminadas todas las canciones.

Mi desafío es interpretar hacia donde quiere llevar la canción el artista y sumar mi experiencia para enriquecerla y dejarla al máximo. Por lo general en la primera escucha ya tengo una idea de que estética le voy a dar y comienzo a tomar notas y poner marcadores en la sesión. Pasado esto primero identifico, de lo que hay, que sirve y que no; si hay que re grabar algo, afinar, editar y demás. Ya con un terreno amigable tomo decisiones de estructura, luego de instrumentación y al final de arreglos. Trabajo en Pro Tools 10 y para mastering en particular con Triumph, una increible herramienta de ingeniería de sonido.
Antes que nada soy músico (como podes leer en mi bio). Eso quiere decir que, además de las cuestiones tecnicas ineludibles de los estandares del Red Book, siempre voy a tener en mente el aspecto artístico de tu album, EP o sencillo.